Diversión en estado "Pure"
Hasta hace poco el nombre de Disney, asociado al mundo de los videojuegos, significaba dos cosas: O juegos de licencias de sus películas de dibujos animados o juegos extremadamente simples para público infantil. Recientemente la compañía ha dado un paso adelante en el mundo del entretenimiento digital, tomándose más en serio un medio que en países como España ya recauda más que el cine y la música juntas. Uno de los primeros juegos que Disney distribuye con estas nuevas premisas es este Pure de Black Rock Studios, un estreno más que notable.
La premisa de Pure es bastante simple: un arcade de conducción con escasas concesiones a la simulación. Un cruce entre Burnout y el mítico MotoRacer que da como resultado frenéticas carreras de quads en recorridos muy del estilo de los de MotorStorm.
El modo campaña (World Tour) es el centro del juego, sobre lo que pivota todo lo demás. Empezamos creando un Quad a nuestro gusto, con un montón de partes mecánicas y estéticas que modifican el modo de conducción del mismo: más velocidad o mejor aceleración, menos control y más derrape… lo típico. Con el tiempo iremos desbloqueando mejoras y nuevos Quads para poder disponer de varias clases y con distintos tuneos, de tal forma que podamos elegir el más adecuado para cada trazado o prueba. En el tutorial inicial se nos enseña lo básico del juego, la conducción, cómo hacer que nuestro vehículo salte más lejos y lo más importante: los “trucos” que podemos hacer mientras volamos, que irán rellenando una barra de turbo al estilo del Burnout mencionado. Cuanto mayor sea la barra de turbo mejores trucos podremos realizar, lo que le da una (ligera) componente estratégica al juego al permitirnos reservar esta energia para poder acumular más en cada salto o gastarla para adelantar a nuestros rivales con más facilidad o saltar aun más lejos.
Como os podéis imaginar, los recorridos están llenos de saltos grandes y pequeños, estratégicamente situados para acumular energía. Cuanto mejor controlemos la distancia de salto y más cosas hagamos en el aire más difícil será aterrizar, aunque para no romper el ambiente arcade cada caída sólo supone unos segundos de pérdida: nuestro conductor estará sobre el quad de forma casi inmediata, aunque con la velocidad que hubiéramos alcanzado perdida.
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