También nuestros preferidos: los Landkreuzer, enormes y monstruosos vehículos acorazados como el P.1000. Un vehículo cuyas dimensiones estimadas sobre el papel revelan una altura de once metros y al menos cuarenta hombres para tripularlo. Sin duda “distópico” a más no poder. Algunas unidades serán exclusivas de las misiones, no podremos incorporarlas a nuestro arsenal para el futuro.
La cólera de los cielos y el puño acorazado del mar
Efectivamente, Axis Operations 1946 no sólo aporta nuevas unidades terrestres. También aviones como el Fugaku, capaz de lanzar a varias casillas de distancia bombas guiadas por cable. Al que se suma el B-29 estadounidense capaz de lanzar bombas atómicas devastadoras en combate y difícil de derribar. Sin embargo, el poderío militar aportado por este DLC no acaba ahí, también tenemos los superacorazados Yamato, portaaviones varios. Un gran catálogo para hacer las delicias de aficionados a la Segunda Guerra Mundial y a este tipo de juegos.
Estrategia de alto nivel
Axis Operations 1946 sigue la estela del juego base. Esto implica escenarios largos con varios tipos de objetivos: capturar ciudades, destruir unidades concretas. Muchos escenarios tienen objetivos principales, secundarios y objetivos de élite. Si se cumplen los secundarios y los objetivos de élite, los jugadores accederán a fuertes bonificación y una mayor cantidad de fondos para adquirir, reparar o mejorar unidades.
A pesar de lo que promete el DLC, cada misión es muy complicada. Para superarla hay que realizar movimientos y ataques con cuidado, prestando atención a todos los elementos. Cuidando nuestras fuerzas al máximo. Panzer Corps 2 y sus expansiones exigen tiempo, planificación y ciertas dotes. Incluso fracasar varias veces y volver a intentarlo. Por suerte cuentan con buenos tutoriales que ayudan a entenderlo todo. No obstante, no es un juego pensado para novatos del género de la estrategia, sino para veteranos. También para jugadores que busquen grandes desafíos. Realmente en cuanto a la jugabilidad sigue el camino marcado por el juego base, no hay grandes cambios en cuanto a sus mecánicas.
Campo de batalla: EEUU
En cuanto al apartado gráfico y sonoros también vemos cierta continuidad respecto a los elementos originales. Muchos modelos de unidades tienen cierto realismo y un gran aspecto. Por supuesto las unidades nuevas aportan cierta espectacularidad al juego; como los landkreuzer en esos mapas divididos en casillas. En el apartado sonoro poco que añadir, en general es el mismo del juego base. Da la sensación de que se han centrado más en los escenarios, historia y unidades en vez de nuevas mecánicas.