Hablando de experiencias ¿cómo decidió hacer un juego exclusivo para occidente?
Mario: Supongo que te refieres a la adaptación de Doki Doki Panic!
Exacto. En esa aventura se pudo manejar por primera vez a Peach y a Toad.
Mario: Bueno. La verdad es que yo no tuve nada que ver. Doki Doki Panic! fue lanzado en Japón en 1987, un año después de la salida al mercado de Super Mario Bros 2: Lost Levels, la secuela directa de Super Mario Bros. De cara al lanzamiento americano se consideró que Lost Levels era excesivamente difícil y, tras el éxito que tuvo mi primera aventura, decidieron que deberíamos ser nosotros quienes apoyásemos el lanzamiento en occidente del Doki Doki Panic!. Tampoco habría tenido mucho sentido puesto que utilizaba personajes de una serie de la televisión japonesa, por lo que cambiar la licencia era sensato.
Así que... unos cambios por aquí, unas llamadas por allá... y ya tenían listo un Super Mario Bros. 2 en exclusiva para occidente. Bueno, sí llegó a salir en Japón, pero en 1992 y bajo el título de Super Mario USA.
Fue una decisión puramente comercial, pero eso permitió que Birdo y Shy Guy se hayan incorporado al universo del Reino Champiñón.
Así que el auténtico Super Mario Bros. 2 fue Lost Levels.
Mario: Sí. Originalmente fue un lanzamiento exclusivo para Japón que no llegó a occidente hasta el lanzamiento americano en 1993, dentro de Super Mario All Stars.
Era un título con muchas peculiaridades.
Mario: La verdad es que sí. Ya no sólo por ser, posiblemente, la aventura más difícil en la que he participado, sino por los elementos únicos que la incluían. Parece que los desarrolladores pusieron todo su empeño en poner el mayor número de trampas posibles. Desde setas venenosas hasta corrientes de aire o enemigos más inteligentes y con mayores habilidades. Muchas de las novedades de esta entrega se han perdido, pero otras muchas se han ido recuperando puntualmente, como las setas venenosas (especialmente en Mario Party o Paper Mario) o, más recientemente, las ventiscas.
Aunque no todo era malo. Fue en esta entrega donde se empezaron a perfilar las diferencias entre mi hermano y yo. Él es más ágil, pero le cuesta mucho más controlarse. Yo voy lento, pero seguro.
Luigi: Una vez intenté usar botas de clavos para evitar los resbalones, pero me pisaba los pies continuamente...
Mario: Ésa fue nuestra segunda gran aventura y la primera secuela, si obviamos mi trabajo en Donkey Kong Jr.
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